Consejos para elegir el mejor chaleco salvavidas para Kayak

¿Cómo nos Ayudan a Flotar los Chalecos Salvavidas?

Mantener a una persona a flote no requiere de mucha fuerza, y esto es lo que proporciona un chaleco salvavidas.

El aire se queda en el interior del chaleco salvavidas y al estar en el agua éste empujará hacia arriba, dado el menor peso del aire, consiguiendo así la flotabilidad.

El chaleco está formado en su parte externa por Nylon o Vinilo y la parte interna generalmente de corcho.  Aunque también los podemos encontrar inflables, los cuales tienen un cartucho de gas de dióxido de carbono cosido al mismo chaleco que se activa. Puede ser automáticamente cuando es sumergido en el agua o manualmente liberando ese gas que llenará el interior del chaleco. Éstos sólo se aconsejan a adultos que sean buenos nadadores.

Elige la Talla Correcta

Los chalecos no son de talla única, deben adaptarse a la envergadura, peso y edad de la persona que lo vaya a utilizar. Los menores deben disponer de un chaleco salvavidas a su medida, de preferencia con cinchas pasadas por las piernas (“pataletas”).

Las mascotas, también tienen unos chalecos especiales diseñados en diferentes tamaños, que deberemos poner al perro o gato, si es que es tu caso y suele viajar en el Kayak contigo.

Los chalecos salvavidas no funcionarán si no están ajustados a la medida correcta de la persona. Deben ajustarse bien para que la persona no se deslice fuera de él, asegurando todos los correajes que lleva, sin apretar, pero que el chaleco no quede suelto.

Podría incluso llegar a taponar las vías respiratorias impidiendo la entrada de aire. Esto ocurriría si el chaleco fuese demasiado grande. Y si es demasiado pequeño, los broches y las hebillas se pueden romper, por lo que el chaleco acabaría quedándose suelto.

Clasificación según su Flotabilidad

Los chalecos salvavidas están homologados con normativa CE, según su flotabilidad expresada en Newtons (N) (10N = 1 Kg de empuje de flotación),  con los distintivos: 50N, 100N, 150N, 275N, SOLAS.

• 50N, Son chalecos de ayuda a la flotabilidad. Para ser usados por personas que sepan nadar y mantenerse en la posición correcta. Indicados para uso en actividades deportivas cerca de la orilla (kayak, vela ligera, SUP, etc.). No están incluidos en la normativa del Ministerio de Fomento para su utilización en la navegación de recreo (Orden Ministerio de Fomento 1144/2003).

• 100N, Estos chalecos tienen una flotabilidad de 10Kg y permiten mantener a flote a una persona que no sepa nadar.

 Este tipo de chalecos no son capaces de mantener a un náufrago boca arriba en el caso de que haya caído al mar inconsciente y sólo están homologados como parte del equipo de seguridad de una embarcación para las zonas de navegación 5,6 y 7  o sea, en la cual la embarcación no se aleje más de 5 millas de un abrigo o playa accesible.

Disponen, además, de silbato para pedir ayuda y cintas reflectantes para ser localizado en la noche.

• 150N, Son chalecos adecuados para navegación hasta 60 millas de la costa. Capaces de mantener a flote y con la cabeza fuera del agua a una persona, incluso si no sabe nadar o está inconsciente. La superficie de las cintas reflectante es mayor.

• 275N, Son chalecos adecuados para navegación oceánica, capaces de mantener a flote y con la cabeza fuera del agua a una persona incluso si no sabe nadar o está inconsciente. También en condiciones de mala mar o si viste ropa pesada.

¿Qué características deben de tener los chalecos salvavidas para Kayak?

Hay diferentes modelos de chaleco en función de la actividad que vayamos a desarrollar con ellos, así para el Kayak, los chalecos tienden a ser cortos, pues en la postura sentada si fueran más largos se nos pondrían en la cabeza, poco voluminosos, por el habitáculo tan estrecho que en ocasiones tiene la piragua, sobre todo las cerradas, y con más amplitud en la zona de la sisa para permitir palear con soltura.

Debe tener un color llamativo (amarillo o naranja) y estar provisto de bandas reflectantes.

Fabricados en materiales resistentes a temperaturas entre –30 y 60º

No deben afectarles productos como petróleos y aceites existentes en la superficie del agua,   así como cierta resistencia al fuego, al desgaste y a los rayos solares.

Según las normas,  los chalecos salvavidas deben llevar además: Un silbato fijado al chaleco por un cordón y bandas reflejantes para mejorar la localización.

Mantener los chalecos en perfectas condiciones, con las hebillas, pasadores y cierres limpios y engrasados.

En el mercado hay numerosos modelos de chalecos salvavidas,  pero los más cómodos y recomendables son los Chalecos Inflables con  homologación “CE” o bien SOLAS y  deben ser revisados anualmente.

¿Por qué Llevar Chaleco Salvavidas en un Kayak?

En el Kayak, a pesar de que en la mayoría de las ocasiones, en el caso de que naveguemos por el mar, nos encontramos relativamente cerca de la costa, un golpe de mar y una maniobra equivocada nos puede llevar al vuelco de la embarcación, por lo que es muy importante que no nos falte el chaleco salvavidas.

En lagos, pantanos y ríos también se pueden producir situaciones muy comprometidas por lo que es fundamental su uso.

La principal misión del chaleco salvavidas es mantenernos a flote hasta que volvamos a subir a la embarcación o en su caso hasta que se produzca un rescate.

 En algún caso, cuando el vuelco se produce en zonas de oleaje o fuertes corrientes, puede que tengamos que ir en busca del Kayak, por lo que un buen chaleco salvavidas nos ayudará en la flotabilidad,  a pesar de que sepamos nadar.

Otro aspecto muy importante es que reduce la hipotermia, manteniendo la cabeza fuera del agua que es por donde se nos va la mayoría del calor corporal.

Como valores-promedio de supervivencia por hipotermia, según la temperatura del agua, tenemos:

• Inferior a 2ºC: supervivencia menor de 45 minutos.
• Entre 2 y 4ºC: supervivencia menor de hora y media.
• Entre 4 y 10ºC: supervivencia menor de 3 horas.
• Entre 10º y 15ºC: supervivencia menor de 6 horas.
• Entre 15 y 20ºC: supervivencia menor de 12 horas.
• Superior a 20ºC: supervivencia indefinida.

Con el chaleco salvavidas puesto, se facilita el rescate al poder ser enganchado con firmeza, además de que te permite llevar todo lo importante a mano, en los bolsillos que generalmente tienen.

También nos aporta un plus de visibilidad por los colores llamativos y las bandas reflectantes, aspecto éste muy importante en un rescate en el mar.

¿Cómo Hacer un Buen Mantenimiento al Chaleco Salvavidas?

Para que un chaleco esté en las mejores condiciones y cumpla su función de ayuda a la flotabilidad para cuidar de tu seguridad, es necesario que se encuentre en excelentes condiciones, para ello, hay que seguir algunos consejos de cuidado que alargarán su vida útil.

No guardes nunca los chalecos en un lugar donde puedan tener contacto con el sol, esto debido a que los rayos UV pueden dañar el material y hacer que el equipo falle al usarlo en el agua.

Cada vez que regreses de una aventura en el agua, deja secar el chaleco al aire libre, nunca lo seques en máquina.

No utilices detergentes abrasivos para limpiarlos, con un poco de agua y un paño húmedo podrás eliminar cualquier tipo de suciedad.

Puedes ayudarte con algún tipo de jabón, pero procura que este no tenga químicos que sean demasiado fuertes y terminen por dañar el material del chaleco.

Al almacenar los chalecos, no los guardes en lugares con demasiada humedad, en cambio, mantenlos en algún lugar seco fuera del sol.